Tarta Dulce de Limón 300g
FLAM_D2754
Tarta de Fruta Confitada de Limón Flamigni – Un Toque de Italia en Cada Bocado 🍋🍰
Déjate seducir por la elegancia de la Tarta de Limón con Fruta Confitada de Flamigni, una obra maestra de la pastelería italiana. Con su equilibrio perfecto entre dulzura y el frescor cítrico del limón, esta tarta es una auténtica celebración de sabor y tradición.
✨ ¿Qué hace especial a esta tarta?
- Sabor vibrante y natural: La acidez refrescante del limón se equilibra con la dulzura suave de la masa y los delicados trozos de fruta confitada.
- Artesanía italiana: Flamigni, con su herencia pastelera, elabora cada tarta siguiendo métodos tradicionales y utilizando ingredientes de la más alta calidad.
- Textura deliciosa: Una base tierna y esponjosa combinada con la textura ligeramente caramelizada de la fruta confitada, que aporta un toque irresistible en cada bocado.
- Perfecta para cualquier momento: Ideal como postre ligero, para acompañar un té o café, o como regalo que encantará a los amantes de los sabores auténticos.
🎁 Un lujo accesible: Presentada en un formato de 300g, esta tarta combina tradición, frescura y elegancia en el tamaño perfecto para compartir o disfrutar solo.
Disfruta de la calidad artesanal y el sabor único de Italia con la Tarta de Fruta Confitada de Limón de Flamigni. Una delicia que transforma cualquier ocasión en un momento especial.
Pairs well with
Si tiene alguna pregunta, no dude en contactarnos. Le responderemos lo antes posible, en un plazo de 24 horas los días laborables.
-
Información de Envíos
Usamos Servicios deCorreos España,MRWpara envíos Nacionales en Península Ibérica. Para envíos InternacionalesUPS
-
Contactanos
info@laboutiquedigod.com
(+34) 627 79 53 98
(+39) 379 273 3535
Originalidad, novedad y frescura
En Flamigni innovación y tradición se unen en la búsqueda del gusto y la calidad.
Nuestra historia
Nuestros fundadores, los hermanos Armando, Lieto y Aurelio Flamigni, abrieron su pastelería en Piazza Saffi, en Forlì, allá por 1930. En pocos años sus tiendas se habían multiplicado, convirtiéndose en una parada obligatoria para todos los viajeros del norte que iban de vacaciones a la Riviera Adriática. Todo cambió en los años 70 gracias a la inspiración del nuevo propietario Marco Buli, yerno de uno de los fundadores, que consiguió aumentar los volúmenes manteniendo los mismos estándares de calidad primero para el turrón, producto estrella en aquellos años y luego, a partir de los años 80, también para los productos horneados, en particular, el panettone. La empresa sigue ofreciendo hoy productos especiales, cuidando cada detalle, desde la elección de los ingredientes hasta el packaging.