Tarta Dulce de Frutos del Bosque 300g
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Tarta de Fruta Confitada de Frutas del Bosque Flamigni – El Sabor de la Naturaleza Italiana 🍇🍓🍰
Descubre la exquisitez de la Tarta de Fruta Confitada de Frutas del Bosque de Flamigni, una creación única que combina la tradición pastelera italiana con el vibrante sabor de las mejores frutas del bosque. Cada bocado es un viaje a los paisajes de Italia, lleno de dulzura y autenticidad.
✨ ¿Por qué te encantará esta tarta?
- Sabor rico y sofisticado: Una masa delicadamente dulce complementada con trozos de frutas del bosque confitadas, como arándanos, moras y frambuesas, que aportan una mezcla equilibrada de dulzura y acidez.
- Calidad artesanal: Flamigni, símbolo de excelencia italiana, elabora cada tarta con técnicas tradicionales y los ingredientes más selectos.
- Textura inigualable: Una base suave y esponjosa con el toque jugoso y ligeramente caramelizado de la fruta confitada, creando una experiencia única al paladar.
- Perfecta para cualquier momento: Ideal para disfrutar como postre, acompañar un café o como un regalo refinado que encantará a los amantes de los sabores auténticos.
🎁 Presentación con estilo: En su formato de 300g, esta tarta es el equilibrio perfecto entre sofisticación, tamaño y sabor, lista para compartir o disfrutar en tus momentos más especiales.
Descubre el placer de la tradición italiana con la Tarta de Fruta Confitada de Frutas del Bosque de Flamigni. Un pequeño lujo que transforma cualquier ocasión en una experiencia inolvidable.
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Originalidad, novedad y frescura
En Flamigni innovación y tradición se unen en la búsqueda del gusto y la calidad.
Nuestra historia
Nuestros fundadores, los hermanos Armando, Lieto y Aurelio Flamigni, abrieron su pastelería en Piazza Saffi, en Forlì, allá por 1930. En pocos años sus tiendas se habían multiplicado, convirtiéndose en una parada obligatoria para todos los viajeros del norte que iban de vacaciones a la Riviera Adriática. Todo cambió en los años 70 gracias a la inspiración del nuevo propietario Marco Buli, yerno de uno de los fundadores, que consiguió aumentar los volúmenes manteniendo los mismos estándares de calidad primero para el turrón, producto estrella en aquellos años y luego, a partir de los años 80, también para los productos horneados, en particular, el panettone. La empresa sigue ofreciendo hoy productos especiales, cuidando cada detalle, desde la elección de los ingredientes hasta el packaging.